Cuando decides aventurarte en un safari por África, no debes descuidar ciertos detalles que no nos deben faltar en un viaje de estas dimensiones, pues toda precaución es poca cuando se trata de adentrarse en el mundo salvaje de este exótico continente.
Lo primero y lo más importante es llevar la ropa adecuada y apropiada a la situación, es decir, ropa cómoda y ligera. También tiene que ser ropa ligera y fresca debido a las altas temperaturas con las que cuenta el lugar normalmente, aunque también hay que ir preparado para el frío nocturno y las lluvias torrenciales que podemos encontrarnos por las noches, aunque esto depende claro está de la zona que se visite.
También es muy importante el calzado, pues la mayoría de safaris aconsejan botas de trekking usadas, zapatos tipo náutico o deportivo. Pero lo más aconsejable son botas con capacidad de sujeción del tobillo, para que lo mantengan firme y protegido, pudiendo evitarnos cualquier molestia o incidente, además de que nos proporcionarán una comodidad extra en esas horas interminables de caminata.
Preparar un botiquín es también primordial en todos los viajes, y más aún en viajes como estos, en los que los pequeños accidentes están asegurados. En nuestro botiquín no podrán faltar los antidiarreicos (por los problemas gastrointestinales que no pueda causar la comida), analgésicos, tiritas y gasas, protector solar (cuando estamos expuestos durante horas bajo el sol), aspirinas, repelentes contra insectos, etc.
Es aconsejable mantenernos hidratados durante las marchas y caminatas de los safaris, por lo cual es muy importante llevar agua, preferentemente en una cantimplora, donde el líquido permanecerá fresco. Las frutas también nos podrán hidratar durante las caminatas, sobre todo las que contienen jugo y vitamina C.
