La cueva de los cristales es uno de los lugares más bonitos del planeta que fue descubierto de casualidad hace ya más de 1500 años, en una zona minera llamada Naica, en el estado de Chihuagua, en México.
Cómo es la cueva de los cristales
La cueva se encuentra a más de 250 metros de profundidad con una humedad del 100% en muchas de las zonas, y que es capaz de alcanzar los 50 grados.
Dado que tiene estas características, es prácticamente imposible que pueda existir algún tipo de vida, pero lo que si ha conseguido este ambiente es que se formen unos cristales dignos de admirar por todo el mundo, de hecho es uno de los lugares que se consideran de los más bonitos, no sólo de México, sino del mundo.
Los cristales son de Selenita y logran forman un verdadero bosque que podría matar lo que se encontrase allí con vida en pocos minutos, ya que se “cocinaría” en escasos momentos. Este es uno de los motivos por los cuales la cueva no se ha podido explorar en su totalidad.
Todas las exploraciones que se hacen en este lugar, tienen categoría de alto riesgo y el miedo que tienen los expertos es que la cueva quede sin acceso de forma natural antes de que pueda ser investigada por completo.
Existe una empresa que hace excursiones a la zona segura de esta cueva, pero que aún así es tan peligroso que exige muchas condiciones a las personas que quieran ir.
Esta zona sólo alcanza los 46 grados (que sigue siendo muchísimo) , dado que el cuerpo sentirá una temperatura de 54 grados, durante todo el recorrido. Para no correr riesgos innecesarios, las visitan no suelen sobrepasar los 5 minutos, ya que se puede empezar a sufrir deshidratación. Además antes de empezar el recorrido hay que beber mucho agua como condición indispensable entre otras.