Hay en México muchas opciones para los viajeros que buscan aventura y un sinnúmero de lugares hermosos que recorrer; todo tipo de paisajes y destinos se pueden apreciar a lo largo y ancho del país. Hay algunos que tienen especialmente algo que a los turistas atrae por montones, a estos lugares se les ha denominado como Pueblos Mágicos. Estos lugares son apreciados por sus atractivos turísticos y por la amabilidad de sus habitantes hacia los turistas.
Empecemos por Taxco, pueblo mágico por excelencia ubicado en el estado de Guerrero, en donde más de una provincia tiene un lugar paradisíaco qué ofrecer. Ciudad colonial y gran productora de plata, con un clima cálido agradable es un destino que promete darnos muchos recuerdos para llevarnos y no solamente un anillo de la mejor plata a nivel mundial. Hay más de un hotel en Taxco que nos ofrece todos los lujos de un hotel en cualquier otro lado, algunos incluso cuentan con caballerizas y hermosas albercas con vista a la ciudad; un panorama hermoso de techos de tejas y callejuelas empedradas.
Otro de los Pueblos Mágicos que México tiene para ofrecer al turismo es Zacatlán, en Puebla. Un lugar con una magia mística, nubosa que nos remitirá a un cuento de Edgar Allan Poe o a un episodio de la dimensión desconocida, en donde la niebla se apodera de las calles para convertirlas en escenarios místicos y desconocidos. No cualquier hotel en Puebla puede ofrecernos, al salir a las calles, apreciar un espectáculo lleno de flores y comidas típicas mexicanas como las chalupas, los tlacoyos y sus tradicionales refrescos de manzana.
En Puebla también, podemos encontrar otro lugar que fue elegido como Pueblo Mágico, pero con un paisaje completamente diferente; Chignahuapan. Este pueblo ubicado en la Sierra Norte nos regala una gran variedad de ríos que al final de su trayecto desembocarán en el Golfo de México, con grandes y hermosas cascadas que en un buen día con sol, nos regalan todos los colores del arcoíris. El nombre de este pueblo significa “sobre las nueve aguas”, un lugar en donde sus habitantes se dedican en su mayoría al cultivo de trigo, avena, maíz y haba.
Hay decenas de pueblos mágicos que podemos visitar en el país, solo tenemos que decidirnos por uno y no olvidar hacer nuestra reservación de hotel antes de viajar, para que la hermosura del paisaje no sea arruinada por una búsqueda hotelera de última hora.