Desde 1991 se celebra en Potes, Cantabria, la Fiesta del Orujo. Este año tendrá lugar entre el 8 y el 9 de Noviembre.
Cada año, durante el segundo fin de semana de noviembre, los orujeros de la zona se reunen a degustar los orujos producidos en la comarca, entre espectáculos de música tradicional, mercados de productos típicos y el marco de los Picos de Europa, que rodean la comarca de Liébana, en Cantabria.
El orujo lebaniego se produce desde la Alta Edad Media, cuando se hacía la cosecha de los viñedos en los monasterios. Pero recién en 1991 se organizó la Fiesta en forma anual, y en el 2012 se la reconoció como una fiesta de Interés Turístico Nacional.
Cada año se designa a uno o varios orujeros, los «orujeros mayores«, que estarán encargados de leer el pregón, participar en el festival con conferencias, y encender las alquitaras.
Se juzga después los orujos producidos en el año, y el último día de la Fiesta se otorga un premio, la Alquitara de Oro, a sus productores.
El orujo es la bebida alcohólica que se destila a partir del hollejo, la cáscara de la uva. Es decir, se extrae el mosto de las uvas, con el que se hace vino, y con el residuo de esa primera prensada, el hollejo, se produce el orujo. Un vino que, sin tener la calidad de los de primera prensada, conserva el sabor y la calidad de las uvas utilizadas. En Italia se conoce al orujo como grappa, en Francia e Inglaterra como marc, y bagaçeira en Portugal.
El orujo es muy popular en Cantabria desde el siglo XIV. Al principio, era una producción regional y familiar, pero luego se instalaron empresas que se dedicaron específicamente a la producción de orujo. Se popularizó, también, en otras zonas de España, como Galicia, León, Zamora y Andalucía.
La Fiesta del Orujo es una buena posibilidad de catar este producto de Cantabria, conocer a sus productores, a sus tradiciones y comprar productos típicos en el mercado regional. Además, claro, de disfrutar de las delicias culinarias que se le ofrecen al turista que visita las tierras de Cantabria, y que conquistarán su alma para siempre.
