Bolivia es uno de los países de Sudamérica con mayores atractivos para los amantes de la aventura y los paisajes de montaña. El país andino atrae por su color, su cultura, sus comidas y su amplitud de propuestas para los viajeros, y en este post encontrarás algunas recomendaciones para aprovechar al máximo tu paso por la nación.
La Paz
Pese a lo que muchos creen, La Paz no es la capital de Bolivia. Este honor le pertenece a la ciudad de Sucre. La Paz es la ciudad más poblada, y acoge al poder ejecutivo y legislativo nacional, pero es más bien a nivel simbólico por sus edificaciones e importancia económica que La Paz funciona como una capital. Fue fundada en octubre de 1548 por el conquistador pacense Alonso de Mendoza.
La altura es el elemento distintivo de la ciudad, desde la zona más baja ubicada a 3200 metros sobre el nivel del mar, hasta la zona más alta que supera los 4000 en El Alto. Un largo entramado de calles en formato de damero, unido a cada pared y ladera que pareciera contar con viviendas, le da un aspecto singular a esta imponente ciudad latinoamericana.
Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa
Si eres de los viajeros que disfrutan la naturaleza y los viajes al aire libre, debes armar tu itinerario para poder conocer la Reserva Eduardo Avaroa. Es la mejor demostración del altiplano andino, con planicies donde juegan las vicuñas hasta guanacos, lagos de colores y montañas nevadas. Una combinación tan singular como maravillosa, que se complementa con excursiones todoterreno donde puedes vivir una experiencia única. Los paisajes son incomparables, y el frío también, ya que se debe dormir en refugio algunas noches en el recorrido, y siempre a temperaturas bajo cero. Pero la experiencia bien lo vale.
