Los parques naturales forman parte de los atractivos turísticos más aprovechados en diferentes países del mundo. Se trata de espacios naturales protegidos que suelen poseer algunos de los paisajes más bellos del planeta, y están diseñados para aprovechar al máximo el turismo de una forma sustentable y amigable para el medio ambiente. ¿Cuáles son algunos de los mejores parques nacionales alrededor del mundo y qué nos pueden ofrecer? Exploramos estas alternativas que encantarán a los fanáticos de la naturaleza, el aire libre y el paisajismo.
1. Parque Nacional de los Glaciares (Argentina)
En 1981 fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Se trata de uno de los parques naturales más bellos del mundo, con lagos helados, imponentes glaciares y enormes montañas andinas. De los 47 glaciares, el más conocido es el Perito Moreno, y el desprendimiento de piezas de hielo es uno de los espectáculos que miles de personas se acercan a ver a lo largo de los años.
2. Parque Nacional de las Islas Galápagos (Ecuador)
Considerado como uno de los parques naturales más importantes del planeta, el parque abarca el 97% del territorio de las Islas Galápagos. El 3% restante está habitado por seres humanos, por lo cual su variedad ecológica y biológica es increíble.
Tiene una extensión de casi 8.000 metros cuadrados y también es una Reserva Marina, en cuyas profundidades viven toda clase de peces y algas. Su gran diversidad natural y la presencia de animales reconocidos como la iguana, la tortuga y el albatros lo convierten en un parque visitado regularmente por turistas amantes de la naturaleza de todos los rincones del planeta. El científico Charles Darwin descubrió en este territorio los conocimientos para elaborar su teoría acerca de la evolución de las especies.
3. Parque Natural de Banff (Canadá)
Ubicado en las Montañas Rocosas, se trata del parque más antiguo de Canadá, y uno de los más bellos e importantes del mundo. Se extiende por más de 6.641 kilómetros cuadrados y en su interior hay glaciares, campos de hielo, cuevas termales, bosques y el increíble lago Moraine cuyas agua de color azul turquesa se han convertido en una de las estampas clásicas de la naturaleza canadiense.
El parque es un gran atractivo turístico que año a año recibe a miles de visitantes de todas partes del globo, deseosos de conocer sus rincones, recorrer los senderos y ver animales en su hábitat natural. Una oportunidad única para aquellos que se consideran verdaderos amantes de la naturaleza y sus formas.
