Desde San Lucar de Barrameda hasta la Línea de la Concepción hay 260 kilómetros de dorada y fina arena bañada por un transparente mar.
Cádiz, la Capital de la provincia, tiene su propia playa y que nada tiene que envidiar a las demás. La playa de la Victoria es una amplia superficie de arena con un limpio mar que bien se merece, junto con La Cortadura y La Caleta (en las cercanías) las banderas azules que demuestran su calidad. Estas playas urbanas son el inicio de un despliegue de lugares, más salvajes o más urbanizados, que recorren parte de ésta Costa de la Luz.
Cádiz es una de las ciudades más antiguas de Europa, tiene más de 3.000 años de antigüedad. Es cariñosamente apodada la Tacita de la Plata y su paseo marítimo hace a muchos recordar el Malecón de la Habana. Ya lo dijo el cantautor Carlos Cano, «La Habana es Cádiz con más negritos, Cádiz es la Habana con más salero.»
De Cádiz hacía arriba tenemos Rota, San Lucar de Barrameda, Chipiona, el Puerto de Santa María y Rota (base militar de la zona). Y si seguimos bajando pasamos por Chiclana, Conil, Barbate, Zahara de los Atunes, Caños de Meca, Tarifa, Algeciras y la Línea (además de otros pequeños pueblos que pueden encontrarse en medio).
Todas con fina arena y agua cristalina, unas preciosas playas que hacen que una ruta por la costa se convierta en un auténtico placer para cualquier veraneante, e incluso fuera de estación, pues el clima de Cádiz es bastante suave en cualquier época del año.
Además, más hacía el sur, es conocido el turismo por deportistas del agua, que buscan el aire de levante (sobretodo en Tarifa) para realizar surf, windsurf y los más novedoso skysurf y paddlesurf.
En la provincia de Cádiz se come bien, en los pueblos hay diversos restaurantes con el famoso pescaito del sur de España, además de que, en las menos salvajes de las playas hay chiringuitos donde poder hacer cualquier almuerzo o cena. Pero para los amantes de las playas más puras también hay cientos de calas que recorren la costa y para las que hay que atravesar la naturaleza más pura hasta llegar a ellas. Muchas de ellas, nudistas.
